Cuando importa un pimiento

Pimiento rojo en un plato.

¿Te gusta compartir fotos de tus platos, o mejor aún de lo que cultivas? ¿O de los platos que consumes cuando acudes a un restaurante o cafetería? A mí también, por eso te voy a dar algunos consejos, que te voy a ilustrar con algunas fotos. La primera foto que he elegido tiene su historia. El año pasado para cambiar de maceta una planta usé tierra de una compostera de la Huerta Dignidad, un huerto urbano de mi ciudad. Al poco del trasplante, observé que empezó a brotar una planta, que me pareció que era como alguna del huerto. Cuando creció un poco comprobé que era un pimiento y lo trasplanté otras dos veces conforme iba creciendo. Un tiempo más tarde echó la primera flor, aunque estaba el otoño ya avanzado, por la suavidad del clima en mi zona. Es la flor de pimiento que compartí anteriormente. A continuación echó otras tres flores, y todas se convirtieron poco a poco en pimientos. Hubo más flores, pero con los temporales de invierno se cayeron, y solamente las primeras completaron el proceso. Aunque el de la foto se ve un poco gordito, es una planta de pimiento de la variedad italiana, los tres primeros pimientos lo mostraban claramente. Recogí los primeros cuando estaban verdes, pero dejé madurar al cuarto y ponerse rojo, con la esperanza de recoger algunas semillas. Después lo preparé para la foto. Como se ve, lo puse en un plato sobre un mantel de un color que armonizara con la composición. Aunque algo distanciado por el plato, el azul oscuro del mantel es complementario del rojo algo apagado del pimiento, y contrasta con el blanco del plato. También me preocupé de tener una luz adecuada. Saqué la foto y le hice los retoques acostumbrados, que explico en las primeras entradas de consejos fotográficos. Un tiempo antes había fotografiado unos tomates de rama que me parecieron atractivos. Hoy me doy cuenta de que podía haber hecho una foto mejor, habrían quedado mejor sobre un mantel o bandeja, en lugar de dejar tanto blanco.

Esto me da pie para dar algunos consejos sobre como fotografiar comida, sobre todo en restaurantes:

  1. Es muy importante el ángulo de la cámara dependiendo del plato y donde se va a publicar.
  2. Desaconsejan fotografiar con la luz del restaurante, porque esos establecimientos no están pensados para tener una buena luz.
  3. Lo mejor es poder fotografiar con luz natural.
  4. Hay que tener cuidado con la temperatura del color. La cálida puede dar la impresión de que los alimentos están pasados.
  5. Usar composiciones por colores complementarios o análogos según el plato. Podemos impactar o producir serenidad. (Ver mi entrada anterior sobre combinar los colores guiándonos por el círculo cromático).
  6. Vestir o acompañar el plato con complementos. Por ejemplo, además de un mantel, las verduras utilizadas para su elaboración son un buen acompañamiento.
  7. Habitualmente se aconseja utilizar una luz suave para fotografiar la comida. Pero tú puedes probar con diferentes tipos de luz, y quedarte con la composición que sea más de tu agrado.
  8. Si se trata de un producto de marca, los colores deben ser idénticos a la realidad. En estos casos no hay lugar para experimentar con los colores.

¿Me invitas a un café o un chocolate?

1,00 €

Pimiento rojo en un plato.
Pimiento cultivado por mí. Los colores usados dar armonía a la composición.
Tomates de rama. Los tomates ofrecen una explosión de color con su rojo intenso, pero habrían quedado mejor sobre un mantel. Es cuestión de aprender de la práctica y los consejos.

Publicado por auxiliadorapachecom

Soy Auxiliadora, una artista con diferentes facetas. Escribo, soy aficionada a la fotografía y las manualidades, además de otras cosas. Tengo fotos en venta en https://www.twenty20.com/auxiliadora.pacheco.m/collections

Deja un comentario